jueves, 16 de mayo de 2013

Capítulo 1

Odio los lunes, sobretodo si hace frío. Cogí mi mochila y salí de casa para encontrarme con Brenda (mi mejor amiga) e ir caminando al instituto.
Hoy hace frío así que voy vestida así conjunto.
Caminé hasta el portal de Brenda y vi lo preciosa que estaba hoy (y todos los días) conjunto. Joder, que envidia le tengo. Siempre está tan preciosa...Sus ojos azules y su pelo pelirrojo (cosa que yo siempre he querido) pegan genial con sus preciosas pecas. Además, se viste tan bien...
-¡Hola mi amor!.-me dijo eufórica, ya que no nos habíamos visto desde el viernes.- ¿Qué te pasa? Te has quedado embobada.

-Ah, oh perdón. Me he quedado embobada viendo lo preciosa que eres.- le dije con una pizca de envidia.

-Tonterías, eso es lo único que dices.-y se abalanzó a abrazarme.-Te he echado de menos.

-Y yo amor.

Nos fuimos caminando hasta llegar al instituto, que estaba a unos pocos minutos de nuestras casas. Siempre habíamos estado juntas, nuestros padres se conocían ya que eran amigos desde hace muchos años, y nos criaron juntas. Somos las típicas amigas: ella, la extrovertida, la que no le tiene miedo a nada, la rebelde, la que no tiene vergüenza, a la que nadie puede manipular. Recuerdo la única vez que le gustó alguien de verdad; se llamaba Álex. Él la engañó, y ella dejó de creer en los hombres. Desde entonces le da asco el amor y todo lo que conlleva. 

Llegamos al instituto y le vi, iba vestido así Conjunto. Mis ojos se cruzaron con sus ojos, esos ojos grises que me habían enamorado desde hace tantos años. Enseguida bajé la mirada para no mirarle a los ojos. Y, como no, Brenda se dio cuenta enseguida.

-Tía, ¿hoy tampoco le vas a hablar?

-No, no me veo con fuerzas.

-Tía, llevas sin hablarle 3 semanas. Mario está muy preocupado.

Mario. Oír su nombre y tener escalofríos. Sí, Brenda tiene razón, tengo que hablarle,no puedo pasar de él ahora. Ha sido mi mejor amigo desde los 6 años y me ha gustado desde siempre, pero él no sabe nada. Nunca se lo he contado, no lo pienso hacer, demasiado 
peligroso. Podría arruinar nuestra amistad, y eso sería lo peor que me podría pasar. Llevaba 3 semanas sin hablarle, porque era incapaz de mirarle a los ojos sin que me entraran ganas de contárselo, y eso no podía ser. Pero, claro está, no podía pasar de mi mejor amigo.

-Tienes razón Brenda, le voy a tener que hablar antes o después.

- Me alegro que te des cuenta. Bueno, yo me voy, suerte mi amor.-me dijo dándome un fuerte abrazo.

Me despedí de Brenda y me acerqué a él.

Le iba a decir algo, pero...No puedo, no soy capaz. Me voy, sí, mejor me voy.

-Bueno, otro día será.- me dije a mi misma. 

Aunque sabía que si seguía así, le perdería como amigo para siempre 



No hay comentarios:

Publicar un comentario